José María Pérez Lara (Jerez de la Frontera, 184)
D. José María Pérez Lara, de quien tan poca cosa conocemos desde el punto de vista biográfico, y que, sin embargo, su obra científica merece más atención. De personalidad apasionante, pletórica de curiosidad, le conduce al mundo de las ciencias naturales, Esta afición le anima a realizar innumerables excursiones por la provincia de Cádiz y a ponerse en contacto con los profesores del Instituto provincial de Jerez, D. Nicolás Latorre, y del Instituto de Cádiz, D. Juan B. Chape, que sin duda le ayudaron a dar los primeros pasos en la ciencia botánica.
Se puso con ahínco a perfeccionar su latín, convencido de que sin el dominio de esta lengua no podría prosperar en el estudio botánico, y estableció amistad con D. Pedro Prolongo, farmacéutico malagueño, con D. Miguel Colmeiro, a la sazón director del Jardín Botánico de Madrid, y con D. Máximo Laguna, los que debieron ayudar y estimular no poco su trabajo. Pero con quien mantuvo un trato directo fue con M. Willkomm, a quien en sus trabajos distingue especialmente. Debió mantener una nutrida correspondencia como corresponsal asiduo en la provincia de Cádiz para el botánico alemán. El espíritu inquieto de Pérez Lara, así como su inconstancia nacida de su gran curiosidad, se manifiesta en el súbito abandono de sus trabajos botánicos después de una época de intensa actividad. En efecto, en 1903 publica unas adiciones a la «Florula gaditana» y no parece que vuelva ya a ocuparse de los vegetales (si no es de una manera tangencial) dedicándose, en cambio, al cultivo de otras ramas de las ciencias naturales, mediante la estrecha amistad que le unió con D. Vicente Martínez Gámez, sacerdote y catedrático de Historia Natural de los Institutos de Jerez y Cádiz, sucesivamente, quien le tuvo como maestro. No perdía ocasión Pérez Lara de acompañar al profesor y sus alumnos en sus excursiones por las cercanías de Jerez, e incluso les ayudó en la redacción de algunos trabajos. Fruto de esta época de su vida fueron diversos escritos publicados en el Diario de Jerez, en los que divulgaba sus conocimientos sobre geología, ornitología, botánica y otros temas de interés naturalista.